Una visión reproductora del currículum. Edición Especial No. 3

Autor: Omar Alor Jacobo.

RESUMEN

El lenguaje es la forma más adecuada que existe de trasmitir la cultura, la educación es un elemento cultural que determina y es determinada por la sociedad donde se desarrolla.

El currículum es el diseño que planifica las actividades académicas, en él se incluyen criterios, contenidos, objetivos y evaluaciones, los que entre todos configuran la forma en que se dará el aprendizaje en esa sociedad, este artículo hace una crítica de cómo se utiliza el currículum y la forma reproductora que tiene en los grupos indígenas de México.

PALABRAS CLAVE: Lengua, códigos, lingüísticos, currículum, diversidad, cultural, resistencia, reproducción, social, escuela.

INTRODUCCIÓN
El lenguaje desde la perspectiva de la comunicación
Se puede considerar que el lenguaje implica una serie de procedimientos utilizados por cualquier animal con el fin de comunicarse, esto incluye a los seres humanos, quienes poseemos el lenguaje más sofisticado entre los animales.

El lenguaje se conceptualiza como el conjunto de sonidos y signos con que el hombre cuenta para poder expresar lo que piensa y siente. El lenguaje escrito es el elemento distintivo que los seres humanos tenemos y nos distingue de los demás seres vivos. Es una de las formas que tenemos para poder comunicarnos y solventar los problemas que se presentan.

El lenguaje es cualquier tipo de código estructurado y los seres humanos tenemos la capacidad de comunicarnos, principalmente usando los signos lingüísticos, por lo tanto, para realizar cualquier comunicación entre dos o más personas es sumamente importante el conocimiento de los mismos códigos lingüísticos.

“Generalmente, el concepto de lenguaje se evalúa de acuerdo a que sea sencillo o complejo, claro o vago, concreto o abstracto. Sin embargo, este análisis es fácilmente presa de un error teórico, al reducir el lenguaje a un problema técnico, a saber, el problema de la claridad” (Giroux, 1997).

Los niños, desde su nacimiento, tienen la capacidad de reproducir todos los tipos de sonidos usados en las lenguas del mundo, lógicamente el idioma que se reproduce debe ser el que hablen sus padres o también llamado lengua materna. “Se parte de la idea que las diferencias entre códigos sociolingüísticos se pueden relacionar con la clase social y que esta relación está caracterizada en términos de usos lingüísticos, es decir, códigos sociolingüísticos, más bien, en representaciones de diferencia de idioma” (Gómez, 2001).

Algunos estudiosos consideran que la adquisición de la estructura y del significado del lenguaje de los niños es el mayor reto intelectual de su vida. ¿Qué papel tiene la lengua materna en la adquisición y aprendizaje de dichos códigos? En la comunicación interpersonal los códigos lingüísticos juegan un papel importante, si entre los interlocutores no existe uno que manejan con naturalidad, entonces no comprenderá con racionalidad lo que el otro expresó.

Un código particular puede generar cualquier número de códigos sociolingüísticos, así pues, los códigos universales y restringidos resultan de sistemas de relaciones sociales, es decir, pueden provocar diferencias en el entendimiento en una clase y la aceptación del grupo. El concepto de código sociolingüístico se refiere a “… la estructura social de los significados y a sus manifestaciones lingüísticas en contextos diferentes pero relacionados” (Bernstein, 2005).

Este concepto de Basil Bernstein que se puede confundir con un déficit lingüístico con los sujetos en las clases, en realidad es una deprivación sociocultural con consecuencias educativas graves.

La lengua “es uno de los principales instrumentos de socialización, la escuela desempeña un papel importante de control sobre los alumnos, transmite valores y usos lingüísticos dominantes, de modo que quienes lleguen a la escuela, con un mundo sociocultural y lingüístico diferente, tienen grandes posibilidades de sufrir conflictos con el resto de la población escolar”.

Son muchos los factores responsables de un pobre rendimiento: la escasa exposición al código (sociolingüístico) escolar, el desajuste lingüísticocultural entre la casa y la escuela, el estatus socioeconómico, las actitudes de las mayorías hacia las minorías y viceversa y las actitudes hacia los códigos tanto el privilegiado en la mayoría de los contextos comunicativos, como cualquier otro código sociolingüístico (Gómez, Osorio y Álvarez, 2003).

El contexto para un buen desarrollo de lenguaje de un interlocutor es la comunidad, en la que participa con fines comunicativos; y sus contextos correspondientes son: el hogar, la familia, el grupo de amigos, el barrio, la escuela, el lugar de trabajo, entre otros, por ende, los interlocutores se entenderán mejor si ambos pertenecen a los mismos códigos lingüísticos, culturales y sociales.

DESARROLLO
Los códigos lingüísticos y sus efectos en el aprendizaje
Los códigos se apegan a una regulación del proceso de comunicación y ésta se sitúa en estructuras sociales diferentes, los códigos presentan a su vez, una serie ordenada de significados que se ubican entre, lo que Bernstein llama lo universal y lo particular, y ambos funcionan de forma contrapuesta dentro del código, es decir, lo universal está presente para casi todas la culturas y lo particular se desempeña en una sola cultura. Bernstein se refiere a los códigos.

“En el nivel lingüístico, los códigos se refieren a la probabilidad de predicción de los elementos sintácticos para organizar los significados” (Bernstein, 2005).

El primer espacio social lingüístico es la familia, en este lugar los niños empiezan a fundamentar el desarrollo de su idioma, con el que se identifican culturalmente. Pero cuando el niño llega por primera vez a la escuela, éste experimenta un ambiente de comunicación extraño, diferente al de su hogar y en algunas ocasiones al de su cultura “… especialmente distinto en tres aspectos: en los sistemas de comunicación privilegiados, en la naturaleza de los referentes comunicativos y en el tipo de relación afectiva y actitudinal que se establece entre los participantes en la interacción comunicativa” (Gómez, 2001).

Es decir, la forma comunicativa en el hogar se organiza según las relaciones con las que se emplea contextualmente y la comunicación empleada en la escuela llega a perder validez porque se aparta de lo contextual. Por lo tanto, contribuye a que los individuos creen jerarquías y clasificación social, tales como clase social, poder, división del trabajo, entre otras.

Bajo la mirada de Bernstein, los estudiantes ingresan a la escuela con la influencia de un código que representa su identidad social. La escuela, entonces, es portadora de experiencias donde se adquieren códigos universales o elaborados, por lo tanto, los alumnos entran en un proceso de aprendizaje continuo, pero, qué sucede cuando el estudiante enfrenta códigos lingüísticos que chocan. Cabe la posibilidad de que la escuela sólo permita el desarrollo en aquellos niños que no tienen ningún problema entre los códigos elaborado y restringido.

Según Bernstein, la escuela es un elemento que pone al estudiante en una organización sistemática de códigos distintos, los cuales no siempre están en concordancia con los códigos culturales, por lo que la escuela no se encuentra preparada para crear significatividad en los estudiantes indígenas, porque existe una diferenciación de códigos.

La finalidad de la educación es desarrollar en cada individuo “… un estado de madurez que lo capacite para enfrentar la realidad de manera consciente, equilibrada y eficiente, y para actuar dentro de ella como ciudadano participante y responsable” (Nérici, 1999).

Pertenecer a un grupo distinto al de la mayoría provoca asimetrías escolares, por lo tanto, actuar de manera consciente, equilibrada y eficiente en la sociedad es un tanto complicado, por lo añejo del problema, ya que ancestralmente en Chiapas la sociedad ha denigrado al indígena y sólo han recibido marginación, aislamiento y discriminación.

Un estudiante de origen indígena ¿está marcado sólo por el simple hecho de pertenecer a un grupo distinto y por tener un idioma diferente al de la mayoría? ¿Se torna difícil educar en ambientes similares para hablantes de diferentes idiomas?

Los diferentes grupos sociales que se pueden formar en un aula, adquieren actitudes con las que valoran comportamientos y expresiones lingüísticas diferentes a las suyas. En la vida cotidiana del salón de clases, o en diferentes escenarios de la interacción social, las personas tienen la intención de “crear impresiones estereotipadas, acerca de sí mismo o de los otros” (Gómez, Maróía Osorio y Álvarez, 2003).

El objeto de estudio del lenguaje lo constituyen: las formas de habla y no la lengua, y más precisamente, el de las restricciones contextuales sobre el habla. Según los argumentos que presenta Bernstein, las formas de habla se consideran como símbolos de las relaciones sociales que determinan órdenes diferentes de relaciones y de pertenencia de los significados. Están determinadas en su origen por una configuración social, éstas a su vez modifican la estructura social de la cual se han originado, regulando las horas que toman las interacciones entre hablantes y transformando así su experiencia (Gómez, Maróía Osorio y Álvarez, 2003).

De acuerdo con lo descrito anteriormente y estableciéndonos en un contexto social complejo, donde la única manera de poseer éxito educativo, laboral y personal es con la adquisición de conocimientos, con los que se puede alcanzar un desarrollo social alto, para ello es necesario adquirir y manejar códigos elaborados. El fracaso o el éxito, por lo tanto, estarán determinados por el uso de los códigos universales o elaborados. Los grupos étnicos, de acuerdo con lo anterior, son los que menos posibilidades tienen de éxito.

Códigos lingüísticos y currículum
La escuela es una institución social y un lugar para la enseñanza y el aprendizaje. Las sociedades enfatizan la construcción de conocimientos y el afianzamiento de la cultura en la escuela, por lo que, estás dos aseveraciones son la principal razón por lo que la gente asiste a las instituciones educativas. También se afirma que en la escuela, además de adquirir conocimientos, se educa. Existen una serie de valores que los niños van adquiriendo para tener un pleno desarrollo en la sociedad.

Se puede “… hablar de unas funciones ocultas de la escuela, que pretende producir una persona (…) [promedio], es decir, mediante la escuela se consigue moldear al individuo, y preparar el tipo de personalidad que la sociedad recomienda. El sistema educativo, es de este modo, un elemento decisivo en la producción de identidades” (Quiroga Maya, 2009).

Los gobiernos tienen la necesidad de estrechar la relación existente entre la educación con el mundo laboral, por lo que en esta época promueven e implementan acciones educativas que están basadas en los nuevos modelos por competencias.

El problema de esta afirmación es que los desiguales siguen siendo tratados como iguales y las oportunidades no son parejas, además, ¿a quién se obedece? ¿Cuáles son las instituciones que están marcando la pauta educacional en nuestro país? Es por eso que la actividad educativa carece de cohesión y coherencia, existe una brecha entre el currículum impuesto y la realidad social. Es entonces donde se considera que el currículum está fuera de orden con respecto al funcionamiento del fundamento sociocultural.

“En la fuente sociocultural se analizan los requerimientos sociales y culturales que el medio formula a la escuela” (Cassarini Ratto, 2004).

Cassarini (2004) comenta que es indiscutible que una de las funciones del currículum sea la propuesta que tiene la sociedad frente a la escuela, el problema real, no es ese, lo complejo se encuentra en la relación de la sociedad-gobierno-escuela. ¿Realmente la propuesta gubernamental va de acuerdo con la sociedad que se tiene en un país determinado? Y por si fuera poco, el mal entendido en esta relación, la escuela, a pesar del discurso político, sigue funcionando como transmisora de información y como reproductora de intereses propios de una clase.

Las teorías de la reproducción enfatizan la problemática del funcionamiento de las escuelas, como tesis central, exponen el beneficio que obtienen de ello los grupos dominantes. Y de manera tajante rechazan las afirmaciones de que la educación es democrática, es decir, igual y para todos. Se duda de que en la escuela se tenga una buena representación cultural y que la instrucción impartida en ella carezca de una objetividad social.

“En definitiva, estudiantes y profesores no tienen la obligación (respectiva y recíproca) de sobrevalorar la cantidad de información que circula realmente en la comunicación pedagógica, la escuela les impone las obligaciones hacia la institución que constituyen la contrapartida exacta de su dignidad de institución atestiguada por la presencia en la institución” (Bourdieu y Passeron, 1998).

La escuela representa el lugar idóneo para moldear personas a beneplácito de otros, es decir, un lugar donde se crea la realidad de cada quien, donde ubican a los estudiantes en las clases sociales que les corresponde, creando las habilidades propias de la clase y determinando la reproducción social.

Louis Althusser indica que la fuerza del poder puede llegar a ser un material importante para la conformación ideológica en las sociedades, la cual, es importantísima para la reproducción social. De tal forma que no es tan complicado llegar a ejercer ese poder, sólo bastan los aparatos represivos e ideológicos del Estado para mantener impotente a las fuerzas dominadas de la sociedad. Basil Bernstein afirma que: “El currículum es la clase que opera para transformar las microdiferencias en macrodesigualdades y estas desigualdades suscitan problemas fundamentales respecto a la relación entre democracia y educación” (Bernstein, 2005).

Esta afirmación deja claro que los intereses de la clase dominante son los que valen en una sociedad que no tiene un sistema educativo por y para su sociedad.

De esta manera, el papel de las escuelas en la reproducción social se manifiesta en la relación que existe entre las clases sociales. Esta relación, adquiere importancia porque la cultura desempeña, en las escuelas, una fuerza en la interacción social, por tal motivo, existe también una reproducción de la cultura.

La reproducción cultural entrelaza la relación de sociedad, cultura, clases sociales para un dominio imperante de la clase dominante a los demás, mediante la escuela. Esta teoría se preocupa por el problema del cómo y por qué se siguen reproduciendo las clases de sociedades capitalistas, enfatizando la problemática de la transmisión cultural en la escuela, además se preocupa por la forma en que la cultura de la escuela es producida, reproducida y legitimada.

En este caso, la escuela es el mediador y repartidor cultural de la sociedad, y ésta va a ser repartida de acuerdo a las clases sociales y a partir de ahí se generan las desigualdades sociales y culturales dentro de la sociedad.

Entonces, qué papel tiene realmente el currículum. Kemis (1998) dice que es una disciplina que pretende estudiar las relaciones entre la teoría y las prácticas educacionales, y entre estas y las sociedades y culturas con las cuales interactúa. Si esto funcionara en México, existiría una línea con intención entre lo que no es y lo que es, es decir, no se tiene una definición entre lo que existe con lo que está planteado en el discurso y cursos con respecto a la educación.

“La mayor parte del trabajo de la teoría crítica del currículum se ha centrado en un análisis de la escolarización en el estado moderno, y gran parte de ella se ha ocupado de la cuestión de cómo la escolaridad funciona para reproducir el saber, las habilidades y las formas de interacción social, así como las relaciones características de la vida social en el estado moderno” (Kemis, 1998).

Todo análisis crítico de cualquier sistema de enseñanza es apto para su comprensión, en el caso de las teorías de la reproducción se tiene que tomar en cuenta que es realizado con tendencias marxistas muy marcadas, el marxismo es una crítica que se hace al sistema de producción capitalista, esto no quiere decir que el marxismo como sistema económico es mejor que el capitalista, pero es el que más prevalece en el orbe mundial, por tal motivo, es merecedor de ser analizado.

Es necesario comprender que las propuestas hechas en las teorías de la reproducción no pueden ser funcionales para todos los sistemas de gobierno. Lo que sí es palpable es que el Estado llega a tener un gran control social mediante el sistema de enseñanza, tomando en cuenta que la educación, en todos los gobiernos, es auspiciada por él y aunque se diga que ésta es autónoma, sucede que el Estado dictamina el tipo de sistema educativo.

Existe una relación tan intrínseca entre el Estado, la educación y la sociedad que no se puede llegar a determinar qué es lo que está en crisis en México, si el Estado, la educación o la sociedad. En el proyecto de la pedagogía está intrínseca la realización del hombre en la sociedad, pero se ha visto que este objetivo no se cumple en su totalidad, esto se debe a que una de estas instituciones está en crisis. Muchos autores argumentan que lo que está en crisis es la escuela, porque ésta no ha completado su objeto de ser.

Ahora, el problema es determinar si esta injusticia existente en el mundo es provocada por la sociedad, la educación o el propio Estado. Las teorías de la resistencia afirman que en un mundo capitalista, globalizado, aquellos que tienen el poder son los culpables de esa injusticia mundial, no quieren dejar de tener poder y los sistemas de enseñanza son el arma perfecta para perpetuar, producir y reproducir social y culturalmente el mundo que ellos necesitan.

La diversidad cultural y la escuela
La multiculturalidad no garantiza la relación entre las diferentes culturas coexistiendo, en ocasiones puede llegar a ocasionar más problemas de los que se pueden solucionar. Reconocer que somos un país pluricultural no determina la convivencia, por tal motivo, se apela al concepto de interculturalidad.

“La multiculturalidad nos dice que en determinado territorio coexisten grupos con culturas distintas. Pero el concepto no atañe a la relación entre las culturas. No califica esta relación. Y al no hacerlo admite relaciones de explotación, discriminación y racismo. Podemos ser multiculturales y racistas” (Schmelkes, 2009).

La interculturalidad en México apenas empieza a desarrollarse, existen esfuerzos, pero aún no alcanzan los resultados esperados. En el año 2009, Sylvia Shmelkes decía que los docentes no tenían la culpa, lo que pasaba era que a los docentes aún no se les había dotado de las suficientes herramientas técnicas, conceptuales y metodológicas para desarrollar su trabajo. También afirma que las aulas en México son racistas, esta aseveración incomoda a los docentes, aunque, al desempeñar su trabajo con alumnos de códigos lingüísticos diferentes a los suyos apliquen la afirmación antes dicha.

“Sin buscarlo, sin que haya en ello intención, las escuelas y las aulas de México son racistas. Denigran a niños y niñas –mexicanos como todos nosotros-, a seres humanos con iguales derechos que el resto de las personas en el país” (Schmelkes, 2009).

En cuanto al plano educativo de cara a la diversidad, veremos que existen, entre otras, una serie de interrogantes: ¿Cómo poner nuestra educación al día en esta coyuntura? ¿Cómo articular los procesos culturales de la sociedad? En fin, hay un conjunto de planteamientos y todos ellos apuntan en la misma dirección: ¿Cómo ser modernos, sin dejar de ser nosotros mismos? Al respecto debemos tomar en cuenta que la educación debe crear espacios que nos permitan reflexionar en torno a la identidad, la cultura y ante el fenómeno globalizador.

Entendiendo que al término educación se le designa una gran variedad de aspectos: entre ellos la transmisión de conocimientos, el desarrollo de habilidades (físicas e intelectuales), el fomento de actitudes, la transmisión de valores morales, la capacitación para el trabajo.

La educación está adquiriendo tintes de expansión, ya que anteriormente se consideraba que sólo en la escuela se podía aprender, ahora eso es falso, la adquisición del conocimiento es amplia y en diferentes partes, por lo que empieza a ganar terreno la idea de la educación virtual. Sin embargo, es muy cierto que aún faltan herramientas que permitan comprender mejor estos cambios educativos y sociales del presente siglo.

En definitiva, nos encontramos en una sociedad que se muestra individualista, competitiva y agresiva. En este contexto de cambio y de competitividad global, la educación, en general, debe reconstruir las culturas e identidades nacionales, para resaltar la unidad en la pluralidad de las identidades históricas, geográficas y culturales. Es así que la educación se convierte en la fuente de poder social que constituye el conocimiento. Ante esto, es necesario ver a la educación como el mejor y principal instrumento para ayudar a las personas a prepararse para una vida plena, una ciudadanía participativa, una posición económica digna y suficiente, una convivencia no conflictiva, una apreciación adecuada de la cultura y unas relaciones sociales en constante proceso de cambio, ya que el respeto implica aceptar que la cultura, cualquiera que sea su origen y su forma, es un elemento constitutivo de la identidad de los individuos y por tanto, debe ser respetada.

Lenguaje y resistencia
Como se mencionó anteriormente, la lengua en el ser humano es distintivo del resto de los seres vivos, Bernstein (2005) dice que la lengua es un conjunto de reglas a las cuales deben someterse todos los códigos lingüísticos, ligados a contextos específicos, es decir, la lengua va de la mano con el sistema cultural al que pertenece. Todos los códigos y formas del habla simbolizan la manera en que se relacionan entre sí, además, crea el sentimiento de pertenencia e identidad en los individuos.

En este proceso de diferenciación e integración del sujeto desde la infancia es posible la valoración del niño y la niña en su ubicación cultural y social.

Para que exista entendimiento y comprensión, dos aspectos fundamentales en el proceso de enseñanza-aprendizaje, es necesario que los interlocutores presenten los mismos códigos lingüísticos y tengan una relación estrecha, tanto en el sistema social, como en el cultural. Aspecto que no es tomado en cuenta por el currículum, cuando en un aula universitaria existe, por lo menos uno, con códigos lingüísticos diferentes.

Es necesario recordar que la lengua forma parte de un sistema cultural y en el sentido más general, la cultura: “… está constituida por las relaciones entre diferentes clases y grupos atados por fuerzas estructurales y condiciones materiales y conformados por un rango de experiencias mediadas, en parte, por el poder ejercido por la sociedad dominante” (Giroux, 1997).

CONCLUSIONES
Si se toma como punto de partida el concepto de cultura de Giroux, entonces significa que el currículum en México depende de la cultura y los grupos dominantes, y los indígenas son considerados grupos subordinados.

La forma de hablar entre los diferentes grupos en la sociedad representa la forma de relación social, la cual, está regulada por la naturaleza de las interacciones, que crean para los sujetos leyes de pertinencia, pertenencia e identidad.

La identidad de la conciencia del sujeto, desde sus primeros años de formación y sus distintas aristas, se ubica históricamente dentro de la lógica de las prácticas sociales en los procesos educativos, para reflexionar sobre la prioridad de educar conforme a valores en la formación del sujeto.

Como lo menciona Giroux (1997), los seres humanos debemos ser examinados desde la perspectiva de nuestras prácticas sociales y contextos históricos específicos, de alguna manera esta sería la forma más equilibrada y se toma en cuenta a todos los involucrados en la escolarización, aunque estas mismas prácticas sociales, dentro de sus contextos históricos, hagan reproducir las condiciones de su propia existencia.

En las diferentes teorías sobre la enseñanza se mencionan estos aspectos cruciales, aunque muy poco se ha hecho en México para ello, Silvya Schmelkes dice que vivimos en un país racista, a pesar de saber que la conformación como nación mexicana es a través de los indígenas.

Como relación de aprendizaje, la interacción entre profesores y alumnos se ve afectada fuertemente por las influencias psicosociales, culturales y económicas del medioambiente.

La idea de que existe una autonomía del sistema escolar es completamente relativa, ya que, tomando en cuenta que Bourdieu considera que la enseñanza sirve de manera específica e insustituible en las estructuras sociales. La reproducción de las relaciones de clase es también el efecto del propio proceso de enseñanza-aprendizaje y ésta se ejerce sobre los sujetos desde la familia y que se mantiene en la escuela, por tal motivo, la interacción entre profesores y alumnos se encuentra influenciada por aspectos psicosociales, culturales y económicos que determinan la existencia real de un currículum emancipador, que no toma en cuenta a todos los grupos en la escolarización ni en la enseñanza de éstos. Además se distingue con ello un ejercicio de violencia simbólica y represiva a estos grupos con distintos códigos sociolingüísticos.

“Todo poder de violencia simbólica, o sea, todo poder que logra imponer significaciones e imponerlas como legítimas disimulando las relaciones de fuerza en que se funda su propia fuerza, añade su fuerza propia, es decir, propiamente simbólica, a esas relaciones de fuerza” (Bourdieu y Passeron, 1998).

La violencia simbólica es ejercida en el momento en que no existe otra forma de enseñanza, sólo con la utilización de un lenguaje y cultura diferentes al que se pertenece, si se encuentran con otros alumnos dentro de la misma aula con las mismas características, naturalmente que éstos se agruparán y aislarán del resto de los alumnos, esto también es parte de esa violencia simbólica que llega de manera indirecta.

Los alumnos que viven estas experiencias, a la larga sufren discriminación social y esto se convierte en un motivo para el bajo rendimiento escolar o para la deserción.

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Una visión reproductora del currículum. Edición Especial No. 3

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