Pequeño pueblo donde al amanecer se siente el aire fresco, una puesta de sol se disfruta al máximo y al anochecer miles de estrellas te observan. Así es Acolman, pueblo con encanto y caracterizado por sus artesanos dedicados a la elaboración de piñatas todos nativos de este pueblo donde las costumbre y el oficio se hereda. Fue hace más de 400 años en el exconvento de san Agustín ubicado en este pueblo, donde se realizó y se rompió la primera piñata siguiendo esa tradición hasta hoy.
En el pueblo de Acolman se lleva a cabo la tradicional feria de la piñata (del 13 al 20 de diciembre) con la intención de rendir homenaje a esta bella artesanía. En las principales avenidas se encuentran cientos de piñatas a la venta por mayoreo y menudeo, de todos colores, tamaño y figuras, en la plaza principal se ofrece un espectáculo de danza y música; aquí mismo se realiza un concurso de piñatas donde la piñata más bonita, llena de color y brillo, que cautive al jurado es la ganadora, premiando al autor con un premio económico.
En el exconvento de san Agustín se llevan a cabo las tradicionales posadas de cada diciembre donde al finalizar la ceremonia se rompe una piñata de 7 picos que representan los 7 pecados capitales: lujuria, pereza, gula, ira, envidia, avaricia y soberbia, la cual se llena de dulces y fruta de temporada que representa los placeres que el diablo ofrece al hombre, el palo de madera con el que golpean la piñata es el símbolo de vencer la tentación, y al niño o niña que pase a golpear la piñata se le vendan los ojos para representar la fe, y al ritmo de una singular canción:
Dale dale dale no pierdas el tino,
porque si lo pierdes,
pierdes el camino,
ya le diste una,
ya de diste dos,
ya le diste tres,
y tu tiempo se acabó.
Pasa cada participante a golpear la piñata, hasta el momento que cae una lluvia de dulces, fruta, risas, felicidad y amor a esta bonita tradición.
Los Acolmences comparten con cariño sus tradiciones a todo aquel que visita este pueblo, con la intención de brindar una gran experiencia, que todos se despidan con una gran sonrisa para pronto regresar.
¿Cómo llegar?
Acolman se encuentra a una hora de Ciudad de México, por la autopista México-Pachuca, posteriormente la desviación 132D saliendo por calzada de Los Agustinos, a tres minutos se encuentra la presidencia municipal de Acolman.
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Por Guadalupe Yadira González Badillo.
Estudiante de Universidad Etac, Coacalco.
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